Me hallaba leyendo la prensa diaria
cuando, de repente, una noticia llamó mi atención de manera significativa y
decidí que podía ser muy interesante para todos aquellos que se acercan
diariamente a mis blogs. Y es que la citada firma germana está desarrollando
una tecnología que permite que el ojo humano controle la dirección e intensidad
del haz de luz de los faros de los vehículos. Sí, tal y como lo leéis, Opel ha
dado a conocer, recientemente, su nuevo proyecto de desarrollo de una
sofisticadísima tecnología de seguimiento ocular, que será implementada en su
tercera generación de iluminación adaptativa. Parece que los alemanes no se
conforman con el premiado AFL+ con faros bixenon y sus 10 funciones de
iluminación, que actualmente está disponible en la mayoría de sus modelos. Esta
vez, ansían ir mucho más adelante.
El desarrollo de esta nueva tecnología
comenzó tras el propósito de generar un dispositivo sencillo, que fuera
adecuado para su montaje a los vehículos de serie. Al principio, utilizaron una
simple webcam, enfocada a la cabeza del conductor y que escaneaba zonas de la
cara, tales como los ojos o la nariz, con el objetivo de la detección de los
movimientos de los conductores; así, recibirían la información suficiente para
escanear la línea de visión de los mismos. El sistema traduciría la información
recogida por la cámara web y las convertiría en comandos de datos enlazados con
actuadores, electrónicamente controlados, que permitirían alinear de forma
rápida y precisa, la proyección de los faros de los vehículos. A pesar de que
la idea era, a priori, efectiva; el cálculo de los datos requería demasiado
tiempo y la velocidad de grabación de la cámara web, no era lo suficientemente
rápida.
Debido a esto, era necesario la
realización de una optimización de los parámetros de funcionamiento de la
cámara y de una adaptación del algoritmo de seguimiento ocular. Por lo tanto en
estos momentos, la cámara equipa sensores infrarrojos periféricos y fotodiodos centrales, que escanean los ojos del conductor más de 50 veces por segundo,
tanto de día como de noche. Gracias a un procesamiento mucho más efectivo y
rápido de los datos, los actuadores de los faros, ya pueden reaccionar de forma
instantánea al movimiento de los ojos humanos, realizando ajustes horizontales
y verticales.
Con un último problema se toparon los
ingenieros de la conocida compañía alemana, puesto que los ojos humano, es capaz
de saltar de forma natural (e inconsciente) desde un punto focal a otro; si a
los faros se les permitía seguir dicho movimiento, el haz de luz del vehículo
se movería de forma errónea, pudiendo alumbrar zonas externas a la carretera.
Para arreglar dicho problema, Opel ha creado un algoritmo de retardo que
garantiza un movimiento adecuadamente fluido de la luz.
Una característica fundamental que el
sistema posee es que el seguimiento ocular no necesita ser calibrado
individualmente para cada conductor, puesto que funciona con cualquier persona.
Además, los conductores no deben preocuparse de qué pasaría si se distrajeran,
momentáneamente, dejando de mirar la carretera; la luz de cruce se encuentra
programada para que se asegure siempre un grado mínimo de iluminación adecuada.
Por otro lado, la compañía alemana no
sólo se ha quedado ahí, puesto que está desarrollando un tipo de alumbrado de
carretera que no provoque reflejos y que varíe de forma automática, para
adaptarse al constante tráfico. Esto lo consiguen con un detector que hace que
los LED individuales que se sitúan en el vehículo, sean capaces de averiguar si
existe tráfico opuesto o que circule por delante, para desactivarse. A pesar de
ello, el resto de la carretera permanecerá iluminada, sin ningún tipo de
carencias de luz. Opel ha anticipado, que tendrá listo el sistema en unos 18
meses aproximadamente.
Una noticia que, sin duda, es sinónimo
de innovación y hará que la tecnología continúe al servicio de los seres humanos,
haciéndonos la vida cada vez más cómoda e impresionantemente sencilla.
Saludos cordiales,
Fuente: abc.es
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