Si
bien es cierto que no existe una ley firme que explique por qué algunas
personas consiguen alcanzar el éxito empresarial antes que otras, ni por qué
hay quien nunca lo llega a lograr; la realidad es que existen determinados
sujetos cuya probabilidad de éxito es mayor que la del resto. Tracey Tullis
señala a los viajeros como uno de los colectivos proclives para alcanzar la
cima, y enumera en Lifehack 15 razones por las que poseen una probabilidad mayor de lograr el éxito en los
negocios.
En
primer lugar afirma que estas personas aprenden a desplazar su zona de
confort, debido a que se encuentran en situaciones desconocidas con
frecuente regularidad. Esta circunstancia les hace aprender a moverse en un
entorno a priori inexplorado, lo que les lleva a vivir una serie de
experiencias y a desarrollar un conjunto de estrategias útiles, así como a
saber mantener la calma en momentos de incertidumbre y desconcierto; una
habilidad muy efectiva en los negocios.
Por
otro lado, saben acoger los cambios. Las personas que acostumbran a
rodearse de cosas nuevas y diferentes, tienden a concentrarse mejor y a
asimilar los cambios de forma positiva. Esta libertad de mente es lo que da
lugar a la innovación y a la creatividad. Además, los viajeros aprenden cómo
gestionar sus emociones en situaciones de estrés o tensión, gracias al
desarrollo de un mayor autocontrol, que les permite actuar de manera efectiva
en momentos puntuales como, por ejemplo, en los interrogatorios del personal de aduanas o en
problemas con los hoteles. Este tipo de cualidades resultan decisivas para el
aumento de la productividad en el mundo empresarial e influirán enormemente en
el resultado final.
Asimismo,
las personas que están acostumbradas a desplazarse con frecuencia, sobre todo
al extranjero, están familiarizadas con enfrentarse a una serie de barreras que
pueden dificultar en un primer momento sus experiencias, tales como el idioma o
el tratar con personas desconocidas. De esta forma tienen interiorizado el
hecho de que no siempre se puede tener una
situación bajo control y desarrollan una capacidad mucho más crítica que la
de los demás a la hora de establecer relaciones de confianza. Esta
característica lleva implícita otra de ellas: el saber negociar de forma efectiva.
En este sentido, los viajeros están acostumbrados a negociar eficientemente
para evitar que se aprovechen de su desconocimiento; una habilidad clave para
desenvolverse en el mundo empresarial y posicionarse como líder.
Por
otro lado, la clave del éxito se encuentra en arriesgar; una frase sencilla de
decir pero muy complicada de llevar a la práctica. Este tipo de personas han
aprendido a afrontar el miedo que, en ocasiones, se experimenta al
encontrarse en situaciones desconocidas y en las que no se puede dar marcha
atrás. ¿Veis el símil? En un negocio cualquiera siempre existen riesgos y
temores, y el saberlos afrontar y superar, suele significar el avance del
mismo. La superación de los miedos trae consigo la confianza en uno mismo,
que permite tener una mayor seguridad a la hora de establecer objetivos y
alcanzarlos.
En
conclusión, todas estas habilidades y características tratadas en este artículo
influyen de manera sustancial en que este tipo de personas sean perseverantes
en los negocios y a que sepan recuperarse de los posibles fracasos de forma más
efectiva que los demás.
En
próximos artículos continuaré con la enumeración de las muy acertadas
características que Tracey Tullis destaca como fundamentales para el triunfo
empresarial.
Confío
en que os ayuden para afrontar vuestro particular reto.
Os
saluda,
Fuentes: cincodias.com, lifehack.org.
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